¿Qué significa la adquisición para el Everton?
Club de fútbol EvertonEl Everton, inmerso desde hace tiempo en problemas financieros y en el descontento de los aficionados, podría estar pronto a punto de vivir un momento de transformación, ya que se prepara para dar la bienvenida a nuevos propietarios. El lunes, el Friedkin Group anunció un acuerdo para la adquisición del Everton, comprando la participación mayoritaria de Farhad Moshiri en el club. Esto supone el final del a menudo controvertido mandato de Moshiri.
Este posible cambio en la propiedad se ve como un rayo de esperanza para el Everton, un club acosado por las dificultades financieras, la mala gestión y el bajo rendimiento en el campo en los últimos años. Moshiri, que se hizo cargo de los Toffees en 2016 con grandes ambiciones y gastos suntuosos, supervisó en última instancia un período que los aficionados del Everton probablemente no recuerden con cariño.
Entre el despilfarro de fondos, el liderazgo desorganizado y una plantilla que a menudo ha languidecido cerca del fondo de la tabla de la Premier League, el club ha luchado por recuperar su antigua gloria. Las protestas de los aficionados y las peticiones de cambios en la dirección se han hecho cada vez más fuertes, y algunos miembros de la directiva y el propio Moshiri se ausentan con frecuencia de los partidos en Goodison Park.
Aunque no es la primera vez que los aficionados ven en el horizonte a un posible nuevo propietario (tras la fallida oferta pública de adquisición de 777 Partners el pasado septiembre), la situación del Friedkin Group es diferente. La empresa de inversiones con sede en Miami, 777 Partners, no llegó a cumplir el estricto examen de propietarios y directivos de la Premier League debido a los continuos problemas legales y financieros. En cambio, se espera que el Grupo Friedkin, que ya es propietario del gigante del fútbol italiano AS Roma, supere este obstáculo sin problemas.
El impacto del Grupo Friedkin en el futuro del Everton
Para el ex capitán del Everton Alan Stubbs, la noticia de la posible adquisición es una señal positiva para el club. Compartió su optimismo en la BBC Radio Merseyside: "Dan Friedkin aporta una gran experiencia futbolística y es muy positivo, pero intento no emocionarme demasiado. Llevamos demasiado tiempo sin rumbo y sin ir a ninguna parte fuera del campo".
El acuerdo, que al parecer superará los 400 millones de libras, podría cerrarse en un plazo de ocho a doce semanas, y las personas cercanas a la situación confían en que la operación supere todas las pruebas reglamentarias necesarias. Los conocedores de la situación han calificado el día de "trascendental", que marca un hito importante para el futuro del Everton.
¿Qué aportan los Friedkins al Everton?
El Grupo Friedkin, una potencia de la industria automovilística, cuenta con un importante poder financiero. Aunque las negociaciones se estancaron hace dos meses, los Friedkin ya habían establecido una relación de trabajo con el club, incluida la concesión de un préstamo de 200 millones de libras en junio, que se espera convertir en capital.
Durante ese periodo, otros pretendientes, como el empresario estadounidense John Textor, mostraron interés en adquirir el Everton. Sin embargo, la participación de Textor en el Crystal Palace complicó las cosas, lo que permitió al Grupo Friedkin proseguir las conversaciones entre bastidores.
Esta relación entre ambas partes culminó en el comunicado del lunes, en el que el Grupo Friedkin expresó su entusiasmo por "proporcionar estabilidad al club y compartir nuestra visión de su futuro". Con una nueva inyección de efectivo y la capacidad de liquidar 400 millones de libras de deuda externa, incluido un acuerdo de 225 millones con Rights and Media Funding y un préstamo de 200 millones de libras de 777 Partners a través de A-Cap, la estabilidad financiera del Friedkin Group será fundamental para enderezar la suerte del Everton.
En la actualidad, el club se enfrenta a crecientes desafíos financieros, incluyendo una pérdida reportada de 89,1 millones de libras para la temporada 2022-2023 y una deuda neta global que se ha disparado a 330,6 millones de libras. A pesar de estas alarmantes cifras, la inmensa riqueza personal de Dan Friedkin -estimada en 5.700 millones de libras y clasificada por Forbes como la 383ª persona más rica del mundo- sugiere que el Everton puede haber encontrado finalmente un propietario capaz y comprometido.
¿Una nueva era para el Everton?
El Everton, uno de los clubes con más historia del fútbol inglés, lleva décadas sin triunfar. El último gran triunfo del club fue la Copa de la FA en 1995, mientras que su último título de liga se remonta a 1987. Para un club que ha ganado nueve títulos de liga, esta sequía ha sido especialmente frustrante para los aficionados.
La historia del Grupo Friedkin con el AS Roma puede ofrecer una idea de lo que pueden esperar los evertonianos. Desde que adquirió el club italiano en 2020, el Grupo Friedkin ha inyectado alrededor de 830 millones de libras en la Roma, lo que llevó a su primer gran triunfo europeo: la Europa Conference League bajo el mando de José Mourinho en 2022.
Daniele Verri, periodista italiano especializado en fútbol, declaró a BBC Sport que los Friedkins han sido unos propietarios de perfil relativamente bajo en la Roma. "Son auténticos hombres de negocios estadounidenses. No se relacionan con otras personas ni con los aficionados, y no tienen una conexión directa con el entrenador, así que dejan que los directores o los directores generales se ocupen de esas relaciones", explicó Verri. Es probable que este enfoque de no intervención continúe en el Everton, donde se espera que los Friedkins pongan a profesionales del fútbol a cargo de las operaciones cotidianas, reservándose para sí las decisiones clave.
Sin embargo, los seguidores del Everton podrían estar preocupados, ya que el Grupo Friedkin ha sido criticado por no entender del todo la pasión de la afición de la Roma. "Tienen que tener cuidado, porque en la Roma han demostrado que no saben mucho de fútbol ni entienden lo importante que es la afición, la ciudad y todo el entorno, y el gran papel que desempeñan", añade Verri. La fiel afición del Everton espera que los Friedkins puedan salvar esta distancia.
Retos inmediatos para el Grupo Friedkin
Sobre el terreno de juego, el Everton se enfrenta a una ardua batalla. Tras evitar por los pelos el descenso al final de la temporada 2022-23, el club ha vuelto a pasar apuros. Actualmente ocupa el penúltimo puesto de la Premier League con un solo punto en sus cinco primeros partidos, y la supervivencia volverá a ser el objetivo primordial esta temporada.
De cara al futuro, el traslado a su nuevo estadio Bramley Moore-Dock, con capacidad para casi 53.000 espectadores, promete aumentar considerablemente los ingresos. Se espera que el moderno recinto esté listo para el comienzo de la próxima temporada, y una nueva era en el Everton podría coincidir con este traslado.
El técnico Sean Dyche, al que se atribuye el mérito de haber estabilizado la nave desde su nombramiento, está a punto de cumplir los 12 últimos meses de su contrato. Aunque su puesto parece asegurado por ahora, no es raro que los nuevos propietarios contraten a un nuevo entrenador.
La afición del Everton, desgastada por años de turbulencias, se muestra comprensiblemente cautelosa ante la adquisición de Friedkin. Sin embargo, crece el optimismo ante la posibilidad de que el club tome por fin el rumbo correcto. Nick Mernock, ex presidente del foro de aficionados del Everton, captó las frustraciones de la afición al afirmar que el club se ha gestionado "como una tienda de barrio", sin una estrategia clara. La secretaria de la junta consultiva de aficionados, Julie Clarke, se hizo eco de este sentimiento, expresando su deseo de que los seguidores "simplemente puedan volver a disfrutar del fútbol".
Aunque abunda el optimismo cauteloso, el futuro del Everton bajo el Grupo Friedkin parece brillante, y muchos esperan que esta trascendental adquisición marque el comienzo de una nueva era para los Toffees.